No quiero más engaños, no quiero daños NUNCA MÁS .

miércoles, 9 de febrero de 2011

Si encontras algo más fino que el filo de tu silencio, sólo entonces te amaré. Rebuscada tu respuesta tanto como tu cabeza ,
Tenìas que ser mujer. Eras un rompecabezas
disfrasado de princesa, eras puro rock&roll.
Muy grande la cruz, muy chico el honor,
enana actitud de vivir mejor.
Ya había encayado mi barco en medio de tu pollera, nunca fui buen capitán.
Aunque a veces digo basta en las noches de subasta me la juego hasta ganar. Como toda señorita eras bien histeriquita, eras una ola en el mar. Siempre cinco para el peso
siempre abrazo nunca un beso, y ahora ni torta ni pan. Solo me quedan recuerdos de ese sueño momentaneo, viejos tiempos de adicción.
A planteos poco cuerdos, al placer del desengaño, a la dulce confusión. Sólo me queda el consuelo de saberme muy tranquilo
yo ya se que la peleé. Me pensaba que era el ciego, me pensaba que era el pueblo, que era el tuerto y que era el rey.